¿Alguna vez te has sentido deprimido y no sabes por qué?
Todo parece estar bien: estás sano, tienes comida para comer y un lugar donde vivir, pero por alguna razón todavía no eres feliz.
No te preocupes, no estás solo. A veces estamos tan atrapados en nuestras rutinas diarias que ignoramos las pequeñas cosas que nos hacen infelices.
¡Pero no pierdas la esperanza! Puedes descubrir qué te molesta. El primer paso es hacerse algunas preguntas importantes.
Estas preguntas pueden ayudarle a comprender por qué se siente infeliz.
Así que repasemos estas 10 preguntas clave que debes hacerte cuando te sientas infeliz y no sepas por qué.
1. ¿Qué te da energía y qué te agota?
Empecemos con lo básico. Piensa en tu día habitual. ¿Qué partes te hacen sentir vivo y emocionado?
Tal vez sea ese trote matutino, o tal vez sea el tiempo que pasas leyendo un libro antes de acostarte.
Por otro lado, ¿qué partes de tu día te hacen sentir cansado o estresado? ¿Es una tarea particular en el trabajo o tal vez sea el tiempo dedicado al desplazamiento?
Tómese un momento para anotar estas actividades energizantes y agotadoras.
Este sencillo ejercicio podría revelar mucho sobre el origen de su infelicidad.
Si descubre que su día está lleno de actividades más agotadoras que energizantes, podría ser una señal de que necesita hacer algunos cambios para traer más equilibrio y alegría a su vida.
2. ¿Vive usted de acuerdo con sus valores?
Todos tenemos un cierto conjunto de valores: aquellas creencias y principios que guían nuestras elecciones de vida.
Quizás para ti sea honestidad, o quizás sea ambición, o quizás sea familia.
Ahora, tómate un momento y piensa: ¿tus acciones diarias reflejan estos valores?
Por ejemplo, si la familia es importante para usted, ¿pasa tiempo de calidad con ellos? O si la ambición te impulsa, ¿te estás esforzando para alcanzar tus metas?
Si hay un desajuste entre tus valores y tus acciones, podría estar provocando una sensación de infelicidad.
Identificar esto puede ser el primer paso para alinear tu vida con lo que realmente te importa.
3. ¿Se está tomando tiempo para cuidarse a sí mismo?
Este realmente me impacta. Hubo un tiempo en el que estaba constantemente en movimiento, haciendo malabarismos con el trabajo, la familia, los amigos y nunca tomándome un momento para mí.
Pensé que estaba bien hasta que me di cuenta de que me sentía perpetuamente cansada e infeliz.
Me hizo darme cuenta de lo crucial que es el autocuidado. ¿Estás tomando tiempo para ti? ¿Participas en actividades que te encantan y que te relajan?
Podría ser cualquier cosa, desde un tranquilo paseo por el parque, disfrutar de su taza de té favorita o incluso simplemente pasar un rato tranquilo a solas.
En mi caso, comencé a reservar unos minutos cada día solo para mí: a veces era leer un libro, otras veces simplemente sentarme tranquilamente en mi lugar favorito de la casa.
No pasó mucho tiempo para notar la diferencia en mi estado de ánimo y felicidad general.
Entonces, considere esto: si se siente infeliz y no puede determinar por qué, es posible que no esté dedicando suficiente tiempo a cuidar de sí mismo. Recuerde, no es egoísta; es necesario.
4. ¿Te sientes conectado con los demás?
Los humanos son criaturas sociales por naturaleza. Anhelamos conexión y un sentido de pertenencia.
De hecho, las investigaciones han demostrado que las conexiones sociales fuertes hacen que las personas sean más felices y saludables, mientras que la soledad y el sentimiento de aislamiento pueden provocar estrés y depresión.
Entonces pregúntate: ¿te sientes conectado con las personas en tu vida? ¿Pasas tiempo con amigos y familiares, participas en actividades sociales o incluso simplemente tienes conversaciones significativas con otras personas?
Si te sientes aislado o desconectado, podría estar contribuyendo a tu infelicidad.
Recuerde, está bien acercarse a las personas, hacer nuevas conexiones o incluso buscar ayuda profesional si se siente particularmente solo.
No eres el único que se siente así y siempre hay formas de cultivar una mayor conexión en tu vida.
5. ¿Eres amable contigo mismo?
Esta puede parecer una pregunta sencilla, pero quizás sea una de las más importantes que puedes hacerte.
¿Eres amable contigo mismo? ¿Practicas la autocompasión o te castigas constantemente por pequeños errores e imperfecciones?
A menudo somos nuestros críticos más duros. Nos decimos cosas a nosotros mismos que nunca se nos ocurriría decirle a otra persona. Esta autocrítica constante puede pasar factura a nuestra felicidad.
Entonces, tómate un momento, cierra los ojos y escucha la voz en tu cabeza. ¿Es amable?
Todos tropezamos, todos tenemos defectos y todos simplemente hacemos lo mejor que podemos. Trátate a ti mismo con la misma amabilidad y comprensión que le darías a un amigo.
Porque, al fin y al cabo, mostrarse amable con uno mismo no se trata sólo de sentirse bien: se trata de respetar nuestra propia humanidad, con todos sus altibajos.
Y quién sabe, esta podría ser la clave para desbloquear la felicidad que te ha estado eludiendo.
6. ¿Estás persiguiendo el sueño de otra persona?
Es difícil de aceptar, pero a veces la verdad duele.
¿Estás viviendo tu vida por ti mismo o estás tratando de cumplir las expectativas de otra persona? ¿Estás persiguiendo tus sueños o estás persiguiendo una visión de éxito que en realidad no es la tuya?
He estado allí, viviendo una vida que parecía perfecta por fuera pero que se sentía vacía por dentro. Estaba marcando las casillas (buen trabajo, bonita casa, coche elegante), pero eran casillas de otra persona, no mías.
Es fácil quedar atrapado en lo que la sociedad, nuestros padres o nuestros amigos piensan que deberíamos hacer o ser. Pero al final del día, es tu vida. Eres tú quien tiene que vivir con las decisiones que tomas.
Así que pregúntate honestamente: ¿estás persiguiendo lo que realmente te hace feliz? ¿O estás viviendo el sueño de otra persona?
Porque aprendí por las malas que tratar de encajar en el molde de otra persona puede hacernos sentir perdidos y profundamente infelices.
Y ya es hora de que paremos. Ya es hora de que empecemos a vivir para nosotros mismos.
7. ¿Estás dispuesto a salir de tu zona de confort?
¿Sabías que nuestro cerebro está diseñado para mantenernos seguros y cómodos?
Si bien esto fue crucial para nuestra supervivencia en el pasado, en el mundo actual puede impedirnos el crecimiento y la felicidad.
Nuestra zona de confort, aunque acogedora y familiar, a menudo puede convertirse en una prisión que nos impide experimentar cosas nuevas y alcanzar nuestro máximo potencial.
Entonces pregúntate: ¿cuándo fue la última vez que hiciste algo nuevo o desafiante? ¿Ha ido a lo seguro, siguiendo los caminos conocidos y evitando riesgos?
Si bien es natural temer a lo desconocido o al fracaso, quedarse estancado en su zona de confort puede provocar estancamiento e insatisfacción.
Si se siente infeliz y no puede entender por qué, puede ser porque anhela crecer, cambiar, un poco de aventura.
Y a veces, todo lo que necesitas es un paso valiente fuera de tu zona de confort para abrir un mundo de posibilidades y felicidad.
8. ¿Se aferra a arrepentimientos del pasado?
Éste está cerca de mi corazón. Durante mucho tiempo, solía cargar conmigo el peso de los errores y arrepentimientos del pasado.
Repetía viejos escenarios en mi cabeza, pensando en lo que debería haber hecho o dicho de otra manera. Era como una mochila pesada que llevaba consigo y me hacía infeliz.
Entonces, ¿te aferras a arrepentimientos del pasado? ¿Te estás castigando hoy por algo que pasó ayer?
Si es así, recuerde que todos cometemos errores. Son parte del ser humano y una forma poderosa de aprender y crecer.
Lo que me ayudó fue darme cuenta de que estos errores del pasado no me definen. Empecé a practicar el perdón, hacia los demás, pero más importante aún, hacia mí mismo.
Y déjame decirte que sentí como si finalmente dejara esa pesada mochila en el suelo.
Si te sientes infeliz y no estás seguro de por qué, es posible que todavía te aferres a arrepentimientos del pasado.
Recuerde, nunca es demasiado tarde para perdonar, aprender de nuestro pasado y seguir adelante.
9. ¿Te estás comparando con los demás?
Vivimos en un mundo donde es muy fácil compararnos con los demás.
Con solo navegar por las redes sociales, nos bombardean con imágenes de personas que viven vidas aparentemente perfectas y es difícil no sentirse inadecuado.
¿Estás comparando constantemente tu viaje con el de los demás? ¿Está midiendo su éxito basándose en los logros de otra persona?
Si es así, no sorprende que se sienta infeliz. La comparación es la ladrona de la alegría.
Me tomó un tiempo comprender que cada uno está en su propio viaje único, con sus propios cronogramas y desafíos.
La única persona con la que deberías compararte es la persona que eras ayer.
10. ¿Vives en el futuro o en el pasado?
¿Estás realmente viviendo en el presente o tu mente está constantemente estancada en el pasado o preocupándote por el futuro?
Es fácil quedar atrapado en lo que fue y lo que podría ser, hasta el punto de que nos olvidamos de disfrutar y apreciar lo que es.
He pasado innumerables noches sin dormir preocupándome por el mañana o repitiendo escenarios pasados. ¿Adivina qué? Sólo me robó la paz y me dejó sintiéndome infeliz.
Lo que debemos recordar es que la vida está sucediendo ahora mismo, en este mismo momento. Y si siempre estamos mirando hacia adelante o hacia atrás, lo vamos a perder.
Aprender a vivir el presente es un viaje, pero cada paso que se da es un paso hacia una vida más feliz y plena.
Recuerde, está bien sentirse infeliz a veces; es parte del ser humano.
Pero si constantemente te sientes así y no puedes entender por qué, estas preguntas podrían ayudarte a descubrir lo que realmente sucede debajo de la superficie.
Se necesita coraje para enfrentar nuestros sentimientos de frente, pero hacerlo es el primer paso hacia la curación y la felicidad que mereces.
¿Te gustó mi artículo? Me gusta en Facebook para ver más artículos como este en tu feed.